Una tradicional recolección de café, realizada por estudiantes, académicos y funcionarios de la UNA, fue el marco para la primera entrega de café de la UNA para semilla al Instituto Costarricense del Café (ICAFE).
Al grito de ¡corte! inició la cosecha. Decenas de estudiantes, académicos y funcionarios de la Universidad Nacional, participaron de la recolección de café; casi al medio día y al ritmo de una alegre cimarrona, se midió el café cosechado.
Esta actividad se llevó a cabo con el objetivo de realizar la primera entrega de café de la UNA para semilla a manos de Alfredo Garita, del Instituto Costarricense del Café (ICAFE). “Esta entrega es de especial relevancia por la importancia comercial de esta variedad; nuestro objetivo es entregar semilla certificada”, destacó Garita.
El café de la UNA se produce en la Finca Experimental Santa Lucía de esta Universidad y su fin es consolidar la academia con la producción agrícola.
De acuerdo con Hellen Sancho, coordinadora del proyecto, ahora se cuenta con cuatro hectáreas de café, que por las condiciones climáticas, características de suelo y sobre todo la altura a la que se cultiva, deriva en un grano clasificado como “Strictly Hard Bean”, el mejor cotizado en el mundo.
Para Carlos Morera, vicerrector de Investigación, esta entrega simboliza más que un producto de alta calidad, el rescate de la identidad costarricense. “No solo es una semilla, es la tradición de ir a coger café en familia, es el valor ecológico y el no darle la espalda a una herencia que nos han dejado nuestros antepasados”.