La cerveza o el yogurt que usted va a disfrutar, esos desechos plásticos que no soporta más, la salud de nuestras aguas y suelos, y las vacunas del futuro. Decenas jóvenes ya dan sus primeros pasos en el mercado costarricense, dando respuesta a situaciones país.
Los 7 primeros en asumir en primera línea esos retos fueron Nathalie Guzmán, Alberto Alvarado, Bárbara Gutiérrez, Luis Fernández, Stephanie Vargas, Juan José Rojas y Melissa Solís. Desde el año pasado, ellos conforman la primera generación de ingenieros en bioprocesos industriales en la historia de la educación costarricense.
La carrera pertenece a la Escuela de Química de la Universidad Nacional (UNA): “es un lindo reto frente a estos temas de gran potencial, solo piense en el tratamiento de las aguas residuales o la posibilidad de innovar en alimentos y bebidas fermentadas, o incluso convertir residuos en materia prima para generar un producto”, explicó Alberto Alvarado, estudiante recién graduado de la UNA en ingeniería de bioprocesos industriales. “Es momento de asumir estos desafíos personales y del país mismo”, añadió Nathalie Guzmán, otra de las ingenieras en bioprocesos industriales recién graduada.
Según consta en la página web de dicha carrera “la ingeniería de bioprocesos industriales es una rama interdisciplinaria que integra los conocimientos químicos, biológicos y principios tradicionales de la ingeniería, con el fin de solucionar diversos problemas a nivel de producción, salud y energía”.
A continuación, una entrevista completa sobre el tema.