Fomentar las relaciones positivas en los centros educativos forma parte de las acciones que proponen especialistas del INEINA para prevenir la violencia en el ambiente escolar, según expusieron en el foro “Retos de la universidad pública ante el problema de la violencia”, realizado en el CIDE.
La falta de acciones para combatir la violencia preocupa a los profesionales del Instituto de Estudios Interdisciplinarios en Niñez y Adolescencia (INEINA) sobre todo porque coinciden con Alice Miller, autora del libro Del origen del odio, en que “la violencia que se ejerce sobre los niños es devuelta luego a la sociedad”. Desafortunadamente, las estadísticas muestran que los lugares donde más se maltrata a los menores son la casa y en la escuela, precisamente aquellos donde deberían recibir más protección.
Investigaciones del INEINA así lo confirman. Un estudio sobre la percepción de los niños, niñas y adolescentes en relación con la violencia que se presenta en diferentes contextos donde se desenvuelven, evidencia que ellos experimentan incidentes de violencia física, verbal y la violencia psicológica, según informó María Esther Morales, académica del Instituto, durante el foro “Retos de la universidad pública ante el problema de la violencia”, realizado en auditorio Marco Tulio Salazar del Centro de Investigación y Docencia en Educación (CIDE).
En cuanto a la violencia que más se presentan en los centros educativos, los niños mencionaron las peleas entre los estudiantes, la violencia verbal y las agresiones emocionales y psicológicas. Entre las reacciones que tienen cuando experimentan situaciones de violencia con la participación de otros compañeros, los menores dicen “las evitan” o “buscan ayuda”. Las opiniones de los adolescentes consultados coinciden en gran medida con las de los niños. Los menores manifiestan que ante un acto de violencia en el que ellos son la víctima se sienten maltratados, irrespetados, culpables, impotentes e inseguros.
En la investigación participaron 222 niños y niñas de de tercero, cuarto y quinto nivel de centros educativos de Golfito, Cartago, Tibás, Heredia, Pérez Zeledón, Pavas y San Antonio de Belén, así como 168 adolescentes de octavo, noveno y undécimo de los Liceos de la Aurora, Belén y Rincón Grande de Pavas y un colegio de Cartago.
Para prevenir la violencia, la directora del INEINA, Ana Teresa León, sostiene que es preciso promover el desarrollo integral de las personas. “Si hay desarrollo integral hay menos probabilidades de violencia, pero si no hay, la gente se pone mucho más tendiente a portarse violenta”, advierte.
Por su parte, Rodolfo Vicente, considera que entre las acciones que se deben promover para prevenir la violencia en los centros educativos destaca el de convertir a la escuela en un lugar seguro para los menores, mediante la promoción de relaciones positivas entre profesores y alumnos, entre estudiantes y con los padres de familia y la comunidad.