Expertos recomiendan aprovechar para realizar actividad física y movimiento humano en familia, mientras se encuentren bajo la modalidad de hospedaje “todo incluido”, durante vacaciones de medio periodo.
Llegan las vacaciones de medio periodo, algunas familias y estudiantes aprovechan estas dos semanas para recargar energías de cara al segundo ciclo lectivo. Otros, quizá dispondrán de sus ahorros para darse una escapadita a un hotel todo incluido y así disfrutar de sus servicios completos e instalaciones. Sin embargo, una cantidad considerable de personas visita estos hoteles con la única meta de atiborrarse, tras considerar que si pagaron por un todo incluido, eso significa comer hasta casi “estallar”.
Tras esta realidad, Gustavo Rivera, promotor de la salud y coordinador del proyecto Ambientes de Trabajo Saludables de la Universidad Nacional (ATS-UNA), explicó que quienes visitan un hotel todo incluido con la idea errónea de comer y beber todo durante los tres días que normalmente dura el periodo de hospedaje, ignoran que a la vuelta del paseo, la inversión en tratarse una enfermedad por el abuso en las comidas, tiende a pasar una factura más alta que lo invertido en el hotel todo incluido, al punto que lo podría llevar hasta la muerte.
Rivera comentó que el consumo de calorías de forma desproporcionada podría representar una ganancia de 12 mil calorías, cuando la ingesta calórica diaria normal en el hombre ronda las dos mil calorías y en las mujeres las mil seiscientas. "Cuando he tenido la oportunidad de visitar uno de estos hoteles he visto que las personas suelen abusar de los carbohidratos, azúcares e ingesta excesiva de alcohol, incluso en una ocasión me di cuenta de una turista que cada rato iba al baño a vomitar para seguir comiendo", expresó Rivera.
El coordinador de ATS-UNA comentó que quienes abusan de la ingesta de comidas y bebidas, bajo el concepto de todo incluido, corren el riesgo de padecer de obesidad y consecuencias como diabetes e hipertensión, o bien, si ya se tiene alguna de esas enfermedades podría presentar comas diabéticos y en el peor de los casos la muerte.
Como para vivir
Como recomendación, el especialista indicó que cuando se visitan los hoteles todo incluido, el huésped debe ser consciente de que ese régimen de estancia significa que el resort pone a su alcance una serie de actividades y atracciones, incluido el servicio completo de alimentación en el momento que la persona lo requiera, sin tener que abandonar las instalaciones del inmueble.
Además, procurar no variar el plan alimenticio que se tiene en el hogar, sobre todo con los niños en edad escolar. A la hora de las comidas aproveche las ensaladas y frutas naturales, sin aderezos y cuide el consumo de carbohidratos y proteínas. Se debe prestar atención al consumo de alcohol en los adultos y que los niños no se excedan en dulces. A la vez, realizar actividades recreativas que involucren el movimiento por al menos 30 minutos.
Y finalmente, que la persona interiorice que se debe comer para vivir y no vivir para comer. Si tiene problemas controlando esto, mejor no vaya a esa modalidad de hoteles y aproveche su dinero en actividades que usted pueda controlar.