El pasado 19 de junio se inauguró el Primer Congreso de Investigación Interdisciplinaria: el Reto de la interdisciplina, donde se contó con la participación de los especialistas invitados Juan Carlos Barrón y José Antonio Amozurrutia, de la Universidad Autónoma de México.
El Primer Congreso de Investigación Interdisciplinaria: el Reto de la interdisciplina se inauguró el pasado 19 de junio, en el Complejo Cibeles, en Heredia.
La actividad estuvo presidida por el rector de la Universidad Nacional (UNA) Alberto Salom, el vicerrector de Investigación Daniel Rueda, el vicedecano de Estudios Generales Miguel Baraona, y los especialistas invitados Juan Carlos Barrón Pastor y José Antonio Amozurrutia, secretario académico e investigador, respectivamente, del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El mensaje oficial de inauguración lo ofreció el rector Salom, quien se refirió al razonamiento inter y trans-disciplinario en el estudio de las ciencias, las humanidades, las letras, las artes y la cultura y cómo el estudio de estas áreas han servido para sentar las bases actuales del conocimiento.
El rector comentó sobre la forma cómo se organizan los centros universitarios y particularmente la UNA para “aprender a pensar”, donde las áreas de conocimiento de engloban en secciones de estudios similares.
Además, habló sobre la responsabilidad de las nuevas generaciones de que las investigaciones sean responsables y coherentes con la sociedad y la naturaleza con una nueva concepción del conocimiento interdisciplinario y no solo desde una única visión epistemológica, “ya que la verdad es escurridiza y pertenece a todo el conocimiento; con el debido respeto que se debe tener hacia este”.
El rector hizo un llamado a la comunidad universitaria a procurar la integración de los conocimientos especializados en campos interdisciplinarios.
El vicerrector de Investigación Daniel Rueda mencionó que desde el siglo XX la interdisciplina se ha convertido en un factor de suma importancia para el quehacer sustantivo de la universidad, más allá de la institucionalidad tradicional.
Rueda señaló que la UNA mantiene una definición tradicional en su ordenamiento académico, jurídico y administrativo y de ahí se deriva la especialización de los miembros de la comunidad universitaria y su responsabilidad para con la comunidad, a través de la construcción de conocimiento a partir de enfoques interdisciplinarios.
Esta actividad académica fue organizada por la Vicerrectoría de Investigación, el programa Comunidades Epistémicas de la Rectoría Adjunta, el Centro de Estudios Generales (CEG) y el Programa de Investigación de la Escuela de Planificación y Promoción Social (EPPS) .
Por:
Rolando Ramírez, estudiante Relaciones Internacionales
Efrain Cavallini, académico EPPS-Rectoría UNA
Sylvia Arredondo, Vicerrectoría Investigación
Foto: Eliécer Berrocal, Relaciones Públicas UNA
