Muchas personas adultas mayores del cantón de Heredia se reunieron este 1 de octubre en el parque central Nicolás Ulloa Soto para celebrar el Día Internacional de las Personas Mayores. La actividad la organizó la Municipalidad de Heredia en asocio con el Programa de Atención Integral a la Persona Adulta Mayor (PAIPAM) de la Universidad Nacional (UNA)
El evento incluyó presentaciones de bailes típicos y un baile popular con la agrupación Chiqui Chiqui, en el marco de un esfuerzo conjunto entre instituciones locales y académicas para promover los derechos y la participación activa de esta población.
Idalia Alpízar Jiménez, coordinadora del PAIPAM, destacó la importancia de la alianza. “Esta unión con el gobierno local es significativa para la comunidad de personas adultas mayores. Tanto la universidad como la municipalidad nos aportamos mutuamente, y eso nos permite llegar a más población. No se trata solo de un día de celebración, es un llamado a respetar y defender los derechos de las personas mayores durante todo el año”.
En el cantón de Heredia viven más de 14 mil personas mayores de 65 años, según datos municipales. La alcaldesa Ángela Aguilar Vargas se refirió a la necesidad de ampliar la participación en estas iniciativas. “Estamos llegando a poco más de 1.200 personas adultas mayores, pero la cifra total en el cantón supera las 14.000. Necesitamos que las familias, vecinos y comunidades transmitan el mensaje para que más personas se integren a la oferta de actividades. Queremos que tengan autonomía, una vejez activa y que aprovechen la inversión pública destinada a mejorar su calidad de vida”.
La voz de los propios beneficiarios también tuvo expresión. Vilma María Masis Acosta, participante de 86 años e integrante del programa universitario, compartió su experiencia: “Desde que entré al PAIPAM ha sido un soplo de vida para mí. Aunque soy viuda y mis hijos ya hicieron su vida, aquí me siento acompañada y activa. Me encanta representar al programa y trabajar con las comunidades. El trabajo comunitario siempre ha sido fundamental en mi vida y creo que como país debemos recuperar esa fuerza que antes nos caracterizaba”.
Entre música, bailes típicos y risas compartidas, el parque central de Heredia se llenó de historias y vivencias de quienes, con décadas de experiencia, celebraron no solo un día en el calendario, sino la oportunidad de seguir construyendo derechos y comunidad.