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Universidad pública sale en defensa de su sentido histórico

Nelly López Alfaro, directora Idespo-UNA y moderadora; Miguel Baraona Cockerell, exvicedecano del Centro de Estudios Generales de la UNA y José María Gutiérrez Gutiérrez, catedrático del Instituto Clodomiro Picado, presentaron el foro El Valor social de la educación superior pública.

Hagamos un ejercicio hipotético: imaginemos un país sin universidades públicas. Mejor aún: supongamos que ese país es Costa Rica. Ahora empecemos a restarle los profesionales de clases medias y bajas que han contribuido en los últimos 70 años en el desarrollo del país con iniciativas impulsadas desde las diferentes instituciones; sigamos: eliminemos la investigación y todo el conocimiento que generan las universidades, ahorrémonos el dinero que gasta el estado en becas y dejemos de escuchar a las comunidades en su búsqueda por soluciones a los problemas que las aquejan. En resumen: olvidémonos de la educación superior pública, privaticémosla y que cada uno se las agencie para acceder a la universidad.

Aun cuando el escenario de hoy es lo opuesto, por ser la universidad pública la institución que mejor valora una amplia mayoría de costarricenses (lo dice el último estudio de opinión del Ciep), los cuestionamientos que se hacen desde al poder a estas instituciones motivaron a varias instancias de la Universidad Nacional (UNA) a reflexionar sobre el valor social de la educación superior.

El panorama se aclara luego de escuchar a los analistas José María Gutiérrez Gutiérrez, catedrático del Instituto Clodomiro Picado de la Universidad de Costa Rica (UCR) y Miguel Baraona Cockerell, exvicedecano del Centro de Estudios Generales de la UNA. Ambos ponderaron y expusieron las razones por las cuales la educación superior pública es la que, aún desde la antigüedad, le ha generado los mayores réditos a las sociedades en diferentes momentos y lugares del mundo. (aquí la conferencia completa)

Gutiérrez destacó cinco aportes de la universidades públicas que han sido claves para consolidar la sociedad costarricense de hoy: la movilidad social y económica de amplios sectores de la población, la formación integral y humanista que reciben los profesionales y que luego trasladan a la sociedad, la generación del conocimiento que convierten a las universidades en nuestro principal reservorio de ciencia y tecnología, el vínculo que crean estas instituciones con la sociedad a través de los programas de extensión y acción social y, no menos importante, el hecho de que éstas se conviertan en centros de reflexión crítica gracias a una autonomía que las separa de intereses y presiones político-partidistas.

Baraona Cockerell explicó con casos por qué lo acertado es la educación pública; hizo ver cómo, desde la antigüedad, es la que mejores resultados le ha dado a la sociedad para formar los nuevos cuadros en la ciudadanía de un país. Puso como ejemplo de la actualidad a Finlandia, que optó por eliminar la educación privada en favor de una buena educación pública ante las ventajas comparativas que esta conlleva.

Caso contrario, usó como referencia su natal Chile, para explicar cómo, tras la arremetida neoliberal, que convirtió la educación en una mercancía, la clase media de ese país ha visto mermada sus posibilidades de ascenso social. “Costa Rica tiene un tesoro con su educación pública que tiene que defender, porque una vez que se pierda ante la privatización es muy difícil recuperar”, alertó. Y es ahora, cuando se escuchan las voces cada vez más estridentes contra la educación pública—agregó—que la sociedad en su conjunto (no solo estudiantes y profesorado) debe salir en su defensa.

Existe, según coincidieron los analistas, una intencionalidad de parte de sectores dominantes, representados por los partidos políticos, en hacer fracasar las instituciones públicas, haciéndolas ver como una carga o un fracaso por no generar ingresos. De ahí que se recurra a la estrategia de recortarse sus recursos “para ir aniquilándolas”—dice Baraona—olvidándose que lo que tiene el estado es del pueblo y que aquél es solo su correa de transmisión.