Con un costo de $150 mil, la Escuela de Química adquirió el equipo de alta tecnología Plasma Acoplado Inductivamente con detector de Masas (ICP-MS), único instalado en Centroamérica, cuya finalidad es la determinación y cuantificación de metales en concentraciones muy bajas.
El equipo de alta tecnología Plasma Acoplado Inductivamente con detector de Masas (ICP-MS), marca marca Agilent 7500, adquirido por la Escuela de Química con un costo de $150 mil, atenderá los diversos proyectos que ejecuta la Escuela de Química de la Universidad Nacional (UNA).
El ICP-MS se encuentra ubicado en el Laboratorio Instrumental de apoyo a la Docencia, Investigación y Producción (LADIP), que atiende las necesidades de todos los proyectos, docencia y tesis de licenciatura de la Escuela de Química, según explicó Efraín Solís Montiel, académico e investigador que tendrá a su cargo de este equipo.
La finalidad del equipo es la determinación y cuantificación de metales y en concentraciones muy bajas. El ICP-MS es un instrumento que a lo interno de la Escuela de Química, ayudará a dar una respuesta más rápida a los proyectos de investigación, docencia, trabajos de tesis, colaboración institucional e interinstitucional, así como en la prestación de servicios.
La técnica de ICP-MS es muy versátil y capaz de determinar cientos de muestras por día a niveles de mg/L o de µg/L , por lo que es capaz de aumentar la capacidad analítica tanto por volumen de muestras como por los niveles de detección de la técnica.
Según explicó Efraín Solís, esto es muy importante de considerar sobre todo en el caso de muestras ambientales que exigen instrumentación de alta sensibilidad.
Los análisis se pueden aplicar a una cantidad muy grande de matrices, entre las que se pueden mencionar, muestras de agua, suelos, alimentos, foliares y matrices ambientales de diferentes características. “Es muy grande la capacidad de dicho equipo, y se espera tener a corto plazo las metodologías de análisis en su punto óptimo para ofrecerlas a la comunidad nacional y universitaria”, dijo Solís.
Explicó Solís que el argón que alimenta el equipo y una radiofrecuencia utilizada, genera una antorcha capaz de producir temperaturas de 5000 a 7000 grados Celcius. Por esta antorcha se hace pasar la muestra que contiene los iones metálicos a analizar, y la respuesta se obtiene en fracciones de segundo, con la gran ventaja sobre la técnica de absorción atómica, de que puede analizarse de forma simultánea muchos de ellos. En las técnicas de espectrofotometría de absorción atómica, los metales se deben analizar de manera individual y eso toma muchos más tiempo que por la técnica de ICP-MS.
El ICP-MS se encuentra ubicado en el Laboratorio Instrumental de apoyo a la Docencia, Investigación y Producción (LADIP), que atiende las necesidades de todos los proyectos, docencia y tesis de licenciatura de la Escuela de Química, según explicó Efraín Solís Montiel, académico e investigador que tendrá a su cargo de este equipo.
La finalidad del equipo es la determinación y cuantificación de metales y en concentraciones muy bajas. El ICP-MS es un instrumento que a lo interno de la Escuela de Química, ayudará a dar una respuesta más rápida a los proyectos de investigación, docencia, trabajos de tesis, colaboración institucional e interinstitucional, así como en la prestación de servicios.
La técnica de ICP-MS es muy versátil y capaz de determinar cientos de muestras por día a niveles de mg/L o de µg/L , por lo que es capaz de aumentar la capacidad analítica tanto por volumen de muestras como por los niveles de detección de la técnica.
Según explicó Efraín Solís, esto es muy importante de considerar sobre todo en el caso de muestras ambientales que exigen instrumentación de alta sensibilidad.
Los análisis se pueden aplicar a una cantidad muy grande de matrices, entre las que se pueden mencionar, muestras de agua, suelos, alimentos, foliares y matrices ambientales de diferentes características. “Es muy grande la capacidad de dicho equipo, y se espera tener a corto plazo las metodologías de análisis en su punto óptimo para ofrecerlas a la comunidad nacional y universitaria”, dijo Solís.
Explicó Solís que el argón que alimenta el equipo y una radiofrecuencia utilizada, genera una antorcha capaz de producir temperaturas de 5000 a 7000 grados Celcius. Por esta antorcha se hace pasar la muestra que contiene los iones metálicos a analizar, y la respuesta se obtiene en fracciones de segundo, con la gran ventaja sobre la técnica de absorción atómica, de que puede analizarse de forma simultánea muchos de ellos. En las técnicas de espectrofotometría de absorción atómica, los metales se deben analizar de manera individual y eso toma muchos más tiempo que por la técnica de ICP-MS.