A escasos seis meses iniciar sus estudios de mandarín, Elena Alfaro Céspedes, estudiante de cuarto año de la carrera de Filosofía de la UNA, viajó por quince días a China para participar en el famoso concurso de televisión El puente chino, que mide el dominio de ese idioma.
A escasos seis meses iniciar sus estudios de mandarín, Elena Alfaro Céspedes, estudiante de cuarto año de la carrera de Filosofía de la UNA, viajó por quince días a China para participar en el famoso concurso de televisión El puente chino, que mide el dominio de ese idioma.
El puente chino es un concurso internacional de mandarín que se realiza en China, en el cual participan estudiantes provenientes de diversos países del mundo y que estudian mandarín en sus respectivas universidades. Este concurso mide el dominio del idioma mandarín y el conocimiento sobre las tradiciones, costumbres y otros aspectos de la antigua cultura china.
Este año, fue la primera vez que Costa Rica participa en este concurso, gracias al empeño de las profesoras chinas Xing Weihui y Sun Hongqian quienes tuvieron la tarea de escoger a dos de sus mejores estudiantes. En este caso, Elena Alfaro, representó a la Universidad Nacional y Raúl Leandro, a la Universidad de Costa Rica. A Elena le correspondió participar directamente en el concurso, en tanto Raúl viajó como observador a la gran final, según las reglas del concurso.
En el concurso, que es transmitido por la televisión china, los participantes deben pronunciar un discurso sobre un tema especifico, como por ejemplo costumbres del país de origen, la comida china, la importancia del estudio del idioma, entre otros temas. Además, los concursantes realizan una actuación que refleje un dominio y habilidad de alguna práctica tradicional de la cultura china. En este caso, Elena, dio un discurso sobre Costa Rica y sus principales tradiciones, asimismo realizó una pintura en tinta china, una de las tradiciones milenarias de esta país.
Elena también se sometió a un examen escrito y una serie de preguntas orales que tratan sobre la cultura china, cuestiones propias del idioma, entre otros aspectos.
Como parte del concurso, Elena efectuó un recorrido por China, que inició en Beijing donde ella y el resto de participantes tuvieron la oportunidad de visitar lugares como: La Gran Muralla, El Palacio de Verano, La plaza de Tian’anmen, La Ciudad prohibida, varios museos y disfrutar de la comida típica del lugar como el famoso pato laqueado. También visitó Fenghuang, lugar que queda en la provincia de Hunan en China Central. El concurso este año se realizó en esta misma provincia pero en la capital llamada Changsha.
Si bien Elena no logró llegar a la gran final, comentó que el concurso significó para ella una oportunidad para compartir con personas del mundo entero que se reúnen en China para competir, por lo que es una ocasión para aprender sobre una gran diversidad de culturas, costumbres y estilos de pensamiento de los diferentes países que son parte de este evento.
El puente chino es un concurso internacional de mandarín que se realiza en China, en el cual participan estudiantes provenientes de diversos países del mundo y que estudian mandarín en sus respectivas universidades. Este concurso mide el dominio del idioma mandarín y el conocimiento sobre las tradiciones, costumbres y otros aspectos de la antigua cultura china.
Este año, fue la primera vez que Costa Rica participa en este concurso, gracias al empeño de las profesoras chinas Xing Weihui y Sun Hongqian quienes tuvieron la tarea de escoger a dos de sus mejores estudiantes. En este caso, Elena Alfaro, representó a la Universidad Nacional y Raúl Leandro, a la Universidad de Costa Rica. A Elena le correspondió participar directamente en el concurso, en tanto Raúl viajó como observador a la gran final, según las reglas del concurso.
En el concurso, que es transmitido por la televisión china, los participantes deben pronunciar un discurso sobre un tema especifico, como por ejemplo costumbres del país de origen, la comida china, la importancia del estudio del idioma, entre otros temas. Además, los concursantes realizan una actuación que refleje un dominio y habilidad de alguna práctica tradicional de la cultura china. En este caso, Elena, dio un discurso sobre Costa Rica y sus principales tradiciones, asimismo realizó una pintura en tinta china, una de las tradiciones milenarias de esta país.
Elena también se sometió a un examen escrito y una serie de preguntas orales que tratan sobre la cultura china, cuestiones propias del idioma, entre otros aspectos.
Como parte del concurso, Elena efectuó un recorrido por China, que inició en Beijing donde ella y el resto de participantes tuvieron la oportunidad de visitar lugares como: La Gran Muralla, El Palacio de Verano, La plaza de Tian’anmen, La Ciudad prohibida, varios museos y disfrutar de la comida típica del lugar como el famoso pato laqueado. También visitó Fenghuang, lugar que queda en la provincia de Hunan en China Central. El concurso este año se realizó en esta misma provincia pero en la capital llamada Changsha.
Si bien Elena no logró llegar a la gran final, comentó que el concurso significó para ella una oportunidad para compartir con personas del mundo entero que se reúnen en China para competir, por lo que es una ocasión para aprender sobre una gran diversidad de culturas, costumbres y estilos de pensamiento de los diferentes países que son parte de este evento.
