Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility

Archivo de la noticia: Marzo 2015


Parásitos en heces caninas afectarían salud humana

 

 

La tenencia responsable de mascotas incluye que los dueños velen por la desparasitación de sus mascotas y recojan sus deposiciones en espacios públicos, aseguran especialistas de la Escuela de Medicina Veterinaria.

 


 

Salir a caminar con el perro por las aceras, parques y playas es algo común en la actualidad, ya que contribuye a mejorar el bienestar humano y animal tanto a nivel físico como psicológico. Sin embargo, el hecho de no recoger las heces de los animales podría poner en riesgo la salud de las personas, debido a la existencia de agentes patógenos zoonóticos en el excremento de los canes. 

 

Así lo evidenció un estudio de la investigadora Ana Jiménez de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional (EMV-UNA), realizado entre 2013-2015, denominado: “Parásitos gastrointestinales (PGI) zoonóticos en caninos de áreas recreativas de Costa Rica”.

 

El muestreo se realizó los domingos, en 15 parques recreativos: seis en San José, tres en Limón, dos en Alajuela y uno en Heredia, Cartago, Puntarenas y Guanacaste, respectivamente.

 

A los propietarios de perros en los parques se les aplicó una encuesta para recopilar información sobre su perro y conocer prácticas de control parasitario. Los perros con y sin dueño se sometieron a un examen general y se recolectaron muestras de heces y de sangre.

 

Resultados

 

La investigación demostró que en el 84% de las heces recolectadas se hallaron parásitos zoonóticos, es decir parásitos que se transmiten de los animales a las personas, los cuales provocan enfermedades como problemas digestivos, cutáneos, oculares o nerviosos, tanto en humanos como en animales. En detalle, 38.2% de las muestras de heces se recogieron directamente del perro y 45.8% de las muestras se tomaron del suelo.

 

Las infecciones producidas por estos parásitos zoonóticos estaban presentes en  los perros y en el ambiente de todas las áreas recreativas analizadas, ya que se encontró al menos un perro infectado y una muestra de heces de suelo positiva a PGI en cada parque. 

 

Los parques con mayor porcentaje de infección de PGI fueron: Monte de la Cruz (59,7%), Fortuna de San Carlos (51,8%), Vargas de Limón (50,0%) y del Agricultor de Alajuela (45,3%), Aserrí (39,0%) y Cañas (38,6%). 

 

Heces infectantes

 

La parasitóloga explicó que la contaminación de suelos con materia fecal de perros es un problema de magnitud considerable, máxime si se toman en cuenta los resultados de la investigación. 

 

Jiménez recalcó, que los parásitos que se encuentran en el intestino del perro excretan huevos en las heces, los cuales son muy resistentes y pueden sobrevivir por mucho tiempo en el suelo. Agregó que si estos perros pasean y defecan en el parque y sus dueños no recogen estas heces se contamina el ambiente, con el agravante, que en invierno la lluvia esparce las heces con las formas infectantes del parásito en el zacate.  

 

 “Si no se recogen la heces en un periodo de tiempo corto los huevos o quistes pueden transformarse en formas infectantes y representar un peligro para los animales, pero sobre todo para las personas y niños, que juegan, descansan, o practican deportes en el parque.  Las formas de contagio con las formas infectantes de las personas  es por vía oral, además algunos pueden penetrar por la piel, y causar enfermedades cutáneas, ojos y estomacales”.

 

Control de infecciones

 

Jiménez, indicó que el elevado porcentaje de PGI encontrado, pone en evidencia que existen fallas importantes en las medidas preventivas de estas infecciones, ya que a pesar de que la mayoría de las personas afirmó desparasitar con regularidad a sus perros, un 38.2% de los canes analizados presentaron parásitos en sus heces.

 

“Posibles reinfecciones podrían explicar en parte este resultado, debido a la contaminación del ambiente, por lo que se deben controlar los parásitos fuera y dentro de las casas,  recogiendo las deposiciones de los perros y utilizando desinfectantes específicos (cloro 1%) en los lugares de la casa donde la mascota permanece la mayor parte del tiempo”, explicó Jiménez.

 

La especialista recalcó que es fundamental informar y educar a los propietarios de mascotas, en cuanto a la importancia del correcto uso de antiparasitarios, buenas prácticas de higiene y recolección de heces.

 

Campaña educativa

 

A raíz de estos datos, el laboratorio Parasitología de la EMV-UNA, impulsa una campaña de información, prevención y educación en distintos espacios públicos del país bajo el lema: “Si mi perro hace su necesidad yo lo desecho por educación”.

 

El trabajo es realizado por estudiantes de la Escuela de Medicina Veterinaria como una actividad de extensión dentro del curso de parasitología, la cual  consiste en educar a la población que visita los parques, así como concientizarlos mediante la entrega de panfletos informativos. 

 

En la información entregada a las personas se detallan las medidas a seguir para evitar que las familias y mascotas adquieran los parásitos: recoger a diario las heces con palas y bolsas, desparasitar a los animales, evitar el hacinamiento y estrés en los animales, controlar la presencia de pulgas y garrapatas, entre otros.

 

Sin embargo, para lograr el éxito de esta campaña, se requiere más apoyo de la empresa pública y privada para costear la confección de los distintos rótulos que se están colocando en los sitios públicos.

 

Agentes parasitarios zoonóticos hallados en el estudio

 

Toxacara canis: ingresa vía oral y migra hasta los ojos, cerebro o vísceras causando daños severos. 

Ancylostomatídeos: ingresan por boca o piel y causan problemas cutáneos y entéricos. 

Giardia duodenalis: ingresa vía oral al organismo y origina una infección en el intestino delgado.

Trichuris vulpis: ingresa por la boca y provoca fuerte dolor abdominal y diarrea.

Dipylidium caninum: a través de la ingesta de pulgas y piojos, ocasiona diarreas y dolores abdominales.