El maestro budista Jigmé Namgyal visitó la UNA para impartir la charla "Claves para el diálogo intercultural en tiempos de fundamentalismos: aportes desde el budismo", invitado por la Facultad de Filosofía y Letras.
Ataviado con su tradicional indumentaria, hay un hombre de 40 años que atraviesa el Campus Omar Dengo de la Universidad Nacional (UNA). Todos lo miran. Camina repartiendo sonrisas. Se dirige hacia el auditorio de Filosofía y Letras. Representantes de esa Facultad lo han invitado a hablar de su vida. Es el venerable maestro budista Jigmé Namgyal: “ser compasivo con todos los seres vivientes y tratarlos en la medida de lo posible como si fuésemos nosotros mismos, da un poder enorme, da una fuerza más allá de lo que podamos pensar”.
La conferencia da inicio a las 6 de la tarde del pasado 23 de abril. Durante dos horas explica su visión de mundo. Su charla la han titulado "Claves para el diálogo intercultural en tiempos de fundamentalismos: aportes desde el budismo".
Su formación como filósofo en Nepal y la India, y sus labores como fundador de centros budistas en Europa, lo han llevado por el mundo entero con su mensaje: “la esencia de la compasión es un deseo de aliviar el sufrimiento de los demás para promover el bienestar, ese es el principio espiritual. Apreciamos la bondad, la aceptación, la paciencia, la tolerancia, el perdón, la generosidad”, dijo Jigmé Namgyal.
La actividad fue organizada por la Facultad de Filosofía y Letras, la Escuela Ecuménica de Ciencias de la Religión, y el Doctorado Interdisciplinario en Letras y Artes en América Central.
El budismo es una doctrina filosófica, no teísta, fundada en la India en el siglo VI a. C. por el buda Siddhartha Gautama. Con el tiempo ha evolucionado hasta desarrollar la diversidad de escuelas y prácticas que hoy conocemos.
Según sus seguidores, el budismo considera a la vida como un proceso en constante cambio y sus prácticas tratan de tomar ventaja de éste principio. “Esto significa que uno puede cambiar para mejorar. La clave para transformarnos es la mente y el budismo ha desarrollado muchos métodos para trabajar con la mente. Uno de los principales es la meditación. Con ella buscamos estados mentales más positivos caracterizados por la calma, la concentración y la ecuanimidad. Al final es posible tener una mayor comprensión de uno mismo, de los demás y de la vida misma”, agregó el venerable maestro Jigmé Namgyal.
Concluida la conferencia se retiró. Pausado, discreto, tal y como llegó, repartiendo sonrisas.
