La graduación universitaria es el momento justo en que muchas emociones se dan cita a la misma vez: hay alegría, expectativa, nostalgia y emoción. Así lo vivieron los 62 estudiantes de la Sede Interuniversitaria de Alajuela (SIUA), que obtuvieron su título este lunes 13 de noviembre.
Bajo su brazo lucen el anhelado título que los acredita como profesionales. Y en sus mentes, la garantía de haber sido preparados en la Universidad Nacional (UNA), que garantiza no solo la excelencia académica, sino la formación integral humanitaria y con una amplia conciencia social para aportar al desarrollo del país.
“Este título les va a cambiar la vida”, decía con profunda emoción Roberto Rojas, coordinador académico de la SIUA, al frente del podio y mirando fijamente a los graduandos y a sus familias que se hicieron presentes en el auditorio Cora Ferro.
Se trata de profesionales en Ingeniería en Sistemas de Información, en Química Industrial, en Inglés y en Administración. Desfilaron uno a uno, a paso certero, y con la consigna de ser ciudadanos de bien que harán un aporte a la sociedad.
Puntualizando al respecto, Randall Hidalgo, vicerrector de Docencia, manifestó que “este título no solo simboliza el fin de una etapa, sino el comienzo de nuevas oportunidades. Ahora están equipados con nuevos conocimientos que les permitirán enfrentar los desafíos del mundo con confianza y determinación”.
Citando al fundador de la UNA, Benjamín Núñez, el Vicerrector de Docencia amplió indicando que “venimos a forjar una nueva universidad porque el pueblo costarricense necesita de una academia que interprete sus aspiraciones, que investigue sus realidades, señale las respuestas a sus problemas en el campo de la ciencia y el humanismo, cooperando con quienes, en los diferentes ámbitos de la vida, están llamados a dejar un mundo mejor para todos”.
Un mensaje en esa línea fue el que pronunció Marco Román, presidente de la Asociación de Estudiantes, quien invitó a los graduandos a “defender lo que es correcto y a que valoren lo que sí importa, que tengan la fortaleza para mantenerse en sus convicciones, seguir su camino y a tener luchas por sus propios sueños”.
El rostro de felicidad fue la constante en el auditorio. Todas y todos levantaron en sus manos el título profesional. La jornada había acabado y era momento de fundirse en un abrazo con sus padres y allegados que asistieron a este momento especial e inolvidable. Sabían que una etapa se cerraba, para que, a partir de ahora, una nueva se asome en sus vidas.
Huella SIUA
Durante su exposición, Roberto Rojas reseñó el impacto que ha tenido la SIUA en sus 15 años en la formación de calificados profesionales, en las instalaciones que comparten con las otras universidades públicas del país.
A modo de ejemplo, indicó que en todos estos años han graduado a 1.422 estudiantes. Asimismo, destacó el hecho de que esta Sede recibe a alumnos no solo de la provincia de Alajuela, sino de todas las provincias del país.
De paso, hizo un llamado abierto para que, a partir de ahora, en su calidad de graduados de la UNA, se sumen a la defensa de la institucionalidad que representan las universidades públicas, que se ha visto amenazada principalmente en lo atiente a la discusión por el presupuesto que el Estado les otorga.
“Nuestra ‘U’ no es solo un edificio con aulas. Representa una serie de acciones afirmativas en donde se incorpora nuestra política de becas y asistencia socioeconómica, laboratorios, bibliotecas, insumos, giras de campo y un personal académico y administrativo de excelencia. Este es el trabajo que año con año nos corresponda defender”, manifestó el coordinador académico de la SIUA.