Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility

Archivo de la noticia: Marzo 2013


Rotunda oposición a siembra de maíz transgénico

 

El Consejo Universitario y el Consejo Académico de la UNA se pronunciaron en contra de la siembra de 35 hectáreas de maíz transgénico, que pretende llevar adelante la empresa de semillas del Trópico y DPL Semillas en la provincia de Guanacaste.


 

La Universidad Nacional (UNA) se opone rotundamente a la siembra de 35 hectáreas de maíz transgénico, que pretende llevar adelante la empresa de semillas del Trópico y DPL Semillas, en la provincia de Guanacaste.

Dicha empresa solicitó al Servicio Fitosanitario del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) autorización para sembrar 35 hectáreas de cuatro variedades de maíz transgénico en Guanacaste, solicitud que la UNA considera riesgosa no sólo por el posible contagio a los genes del maíz criollo, sino por otros riesgos ambientales asociados,  así como por riesgos de afectación a la salud humana y eventuales perjuicios económicos a los agricultores locales.

La posición de la UNA, adoptada por el Consejo Universitario y el Consejo Académico -que reúne a los decanos de la institución- se une a la preocupación externada por diversos sectores civiles, profesionales, académicos y estudiantes en relación con la pretensión de esta empresa de semillas, de cultivar nuevas variedades de maíz.

La oposición de la UNA se basa, entre otros aspectos, en investigaciones realizadas en los laboratorios de la Universidad de Costa Rica, sobre el flujo de genes entre el arroz cultivado y el silvestre en nuestro país,  donde se demostró evidencia indirecta sobre la posibilidad de flujo génico entre el arroz genéticamente modificado y el arroz silvestre. Este problema, según indicaron miembros del Consejo Universitario de la UNA, podría ser replicado en el caso del maíz, que al ser una planta de polinización abierta hace que se incrementen los riesgos de que los genes de los transgénicos se mezclen con los del maíz criollo y mejorado que se cultivan en el país.

 

La presidenta del Consejo Universitario y rectora de la UNA, Sandra León, comentó que las diversas autoridades universitarias consultaron otros estudios y publicaciones científicas, donde se indica que varias universidades norteamericanas han venido alertando sobre riesgos ambientales relacionado con  cultivos transgénicos. Según estos estudios e investigaciones, entre los riesgos ambientales asociados se encuentran: la creación de nuevas plagas y plantas invasoras, aumento de plagas existentes, producción de sustancias que son o podrían ser tóxicas a organismos no blancos, efectos destructivos en comunidades bióticas y desperdicio de valiosos recursos genéticos, seguido de contaminación de especies nativas, entre otros.


También la UNA advierte que la siembra de estas variedades de maíz puede tener efectos negativos en la salud humana por consumo de alimentos transgénicos. En relación con este tema, se analizaron varias investigaciones nacionales e internacionales, desarrolladas en diversos países de América Latina, donde se reportan reacciones alérgicas y resistencia a los antibióticos, entre otros males, por el consumo de alimentos transgénicos.


Por otro lado, las autoridades de la UNA consideran que el maíz criollo tiene una importancia ancestral, ya que es un cultivo autóctono de nuestros pueblos indígenas, con un legado cultural y alimentario de todo el territorio de Costa Rica, que lo ha convertido en un elemento esencial y de alto valor nutritivo en la dieta de los costarricenses.