Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility

Mazo 2019


En el 2030 acceso al agua debe ser universal

En el marco del Día Mundial del Agua y del Ideario Costa Rica Bicentenaria, la Vicerrectoría de Investigación organizó la mesa redonda “Agua y saneamiento en Costa Rica”, el 20 de marzo pasado en el auditorio Clodomiro Picado. 

En celebración del Día Mundial del Agua y en el marco del Ideario Costa Rica Bicentenaria: diálogo Nacional, la Vicerrectoría de Investigación de la Universidad Nacional (UNA) organizó la mesa redonda Agua y saneamiento en Costa Rica: avances y retos en el marco de la agenda país 2030, el 20 de marzo pasado a partir de las 9 a.m., enelauditorio Clodomiro Picado, en el Campus Omar Dengo, en Heredia.

Participaron como panelistas  Yamileth Astorga Espeleta, presidenta ejecutiva del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados;Rolando Marín León, vicepresidente de la Confederación Nacional de Federaciones, Ligas, Asociaciones y Uniones de Asociaciones de Sistemas de Acueductos y Alcantarillados Comunales;Irene Murillo Ruin, secretaria ejecutiva del Centro de Derecho ambiental de los Recursos Naturales (CEDARENA); Armando Moreira Mata, representante de la Dirección de Garantía de acceso a los servicios de salud del Ministerio de salud; y Nelly López Alfaro, directora del Instituto de Estudios Sociales en Población de la Universidad Nacional (Idespo-UNA).
como moderadora actuó María Chaves, del mismo instituto.

Al dar la bienvenida a personas expositoras, así como a los representantes de entidades al tema y público participante, el rector de la UNA Alberto Salom destacó la importancia de proteger el vital recurso hídrico.

Las cifras no son alentadoras. La escasez de agua afecta a más del 40% de la población mundial y se prevé que este porcentaje aumente.

Más de 1700 millones de personas viven actualmente en cuencas fluviales en las que el consumo de agua supera la recarga.

Millones de personas carecen de acceso a servicios básicos de saneamiento, como retretes o letrinas y más del 80% de las aguas residuales resultantes de actividades humanas se vierten en los ríos o el mar sin ningún tratamiento, lo que provoca su contaminación.

En el planeta existe suficiente agua dulce para el consumo libre de impurezas;msin embargo, en la actualidad su reparto no es el adecuado, y según datos de la Organización para las Naciones Unidas (ONU), para el 2050 se espera que al menos un 25% de la población mundial viva en un país afectado por escasez crónica y reiterada de agua dulce.

En el objetivo 6 de los propuestos por la ONU para el desarrollo sostenible, se pretende garantizar la disponibilidad del agua y su gestión sostenible, y el saneamiento para todos. Entre las metas a cumplir para el 2030 se pretende lograr el acceso a servicios saneamiento e higiene adecuados y equitativos; alcanzar el acceso universal y equitativo al agua potable a un precio asequible; aumentar el uso eficiente de los recursos hídricos y mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación por productos químicos y materiales peligrosos entre otros.