El Instituto de Estudios Interdisciplinarios de la Niñez y la Adolescencia (INEINA) de la Universidad Nacional (UNA) ha dado a conocer los hallazgos de un estudio sobre el modelo de evaluación del Ministerio de Educación Pública (MEP). Este proyecto, titulado La evaluación en el Sistema Educativo Costarricense: Luces y Sombras, comenzó en agosto de 2023 y finalizará en diciembre de 2024.
La investigación, que involucra a 294 docentes del primer y segundo ciclo de la Educación General Básica, abarca escuelas públicas de las siete provincias del país. Los resultados revelan preocupaciones significativas sobre la claridad y el equilibrio en el modelo de evaluación actual.
Aunque el modelo del MEP ofrece directrices para evaluar tareas, asistencia y pruebas escritas, los docentes indican que las pautas para evaluar el trabajo cotidiano no son detalladas. Se requiere mayor especificidad en la evaluación del desempeño diario de los estudiantes.
El estudio también señala insatisfacción con la distribución de los porcentajes de evaluación. El peso asignado al trabajo cotidiano (60% o 50%) se considera excesivo, mientras que el peso de las pruebas escritas (10% en el primer ciclo y 15% en el segundo ciclo) se percibe como insuficiente. Además, se detecta una falta de claridad en la evaluación del trabajo diario, lo que sugiere la necesidad de una guía más uniforme.
Los docentes sugieren un enfoque más variado, que incluya talleres, proyectos y actividades extracurriculares, para mejorar el aprendizaje y adaptarse mejor a las necesidades del aula.
El estudio, dirigido por las académicas María Sofía Herrera Segura y Josiane Pawlowski, concluye que se necesitan ajustes en el modelo del MEP. Se requiere una mayor claridad en la evaluación del trabajo cotidiano y una revisión de los criterios y porcentajes de evaluación para optimizar el proceso y beneficiar a docentes y estudiantes.