Investigadores de la Estación de Biología Marina, ubicada en Puntarenas, liberaron más de mil alevines de corvina aguada (Cynoscion squamipinnis) en un manglar en La Islita, cerca del estero de Puntarenas.
Marvin Ramírez y Jorge Boza son los encardados de liderar un proyecto que inició en el 2009 y que pretende recuperar los ecosistemas marinos y repoblar la especie que es de gran interés comecial, pero que ha sido alterada y reducida en gran medida por la sobrepesca en diversas zonas del Golfo de Nicoya.
Un grupo de individuos fue capturado cerca de Isla Venado con la ayuda de pescadores de esa localidad. “Los peces permanecieron durante un año en la Estación de Biología para poder adaptarse a las condiciones y así iniciar con el desove. Actualmente, se producen desoves naturales dos veces por semana, donde se obtienen de 50 a 200 mil huevos “, explicó Ramírez.
El pasado 4 de junio, investigadores de la Estación de Biología Marina, ubicada en Puntarenas, liberaron más de mil alevines de corvina aguada (Cynoscion squamipinnis) en un manglar en La Islita, cerca del estero de Puntarenas. Ellos pretenden liberar entre 500 y mil alevines por semana para recuperar los ecosistemas marinos y repoblar la especie.
Los biólogos se encargan de las etapas de cultivo hasta que los alevines empiezan a alimentarse con zooplantón, posteriormente con trozos de sardina molina y finalmente con pellet. Durante este periodo los investigadores realizan los estudios de parámetros fisicoquímicos para evaluar los sistemas de cultivo en cautiverio tanto de la temperatura como la salinidad y el oxígeno disuelto entre otros.
Luego de dos meses y medio en la Estación, alcanzan un tamaño de ocho centímetros y un peso cercano a los cuatro gramos, esto indica que están listos para ser liberados.
Las larvas son transportadas a aguas superficiales o estuarios hasta que se acomodan a su entorno. “Con la ayuda de funcionarios del Instituto de Pesca y Acuacultura (INCOPESCA) y la empresa privada, se liberaron en un manglar. Este sitio es seguro mientras crecen para luego nadar hacia mar abierto”, comentó Ramírez.
Para el biólogo el objetivo es liberar de 500 a 100 alevines una vez al mes, además de profundizar en la investigación sobre la cría y engorde de la corvina para facilitar el desarrollo y la consolidación de las técnicas reproductivas.
