El ascenso de un totalitarismo de mercado en la sociedad actual está derivando en un “ecocidio” global, que niega la existencia y avance de fenómenos como el cambio climático, y que promueve la destrucción de los recursos naturales.
El término lo utilizó el académico Henry Mora, de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional, para resaltar las consecuencias del modelo económico y social imperante en este siglo, en una de las mesas de apertura del VIII Encuentro Internacional de Pensamiento Crítico, organizado por el Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo), la Vicerrectoría de Extensión y el Doctorado en Ciencias Sociales.
Bajo el título “El pensamiento crítico emancipatorio ante el totalitarismo del mercado y el ascenso de la extrema derecha”, se llevó a cabo esta actividad, los días 24, 25 y 26 de setiembre en la Facultad de Ciencias Sociales.
El hilo conductor de este encuentro tomó como referencia los pensamientos del economista y teólogo de origen alemán Franz Hinkelammert, fallecido en el 2023, y promotor de esta iniciativa.
Justamente, el ecocidio al que hace referencia Mora se basa en el artículo de la Rebelión de los límites, la crisis de la deuda y el vaciamiento de la democracia, propuesto por Hinkelammert.
Es la tesis además de quienes gobiernan sin dar crédito a las amenazas ambientales globales y que han dominado el discurso de expresidentes como Donald Trump en Estados Unidos, Jair Bolsonaro en Brasil y el ex primer ministro de Australia, Scott Morrison.
“No me lo creo” fue la fase que utilizó Trump en el 2018 para desvirtuar un informe de 1.656 páginas elaborado por 300 científicos de 13 agencias federales distintas y que detalla los efectos devastadores del cambio climático y que retrata el negacionismo del hoy aspirante a la presidencia por el Partido Republicano, en las elecciones estadounidenses.
Además del concepto de ecocidio, el académico Mora planteó otras cinco consecuencias que está generando el avance de un modelo capitalista y totalitarista. Entre ellas destacó la escalada del neoliberalismo que proyecta una privatización absoluta y que señala un camino, no hacia una economía de mercado, sino de una “sociedad de mercado”, que convierte a la persona en un capital humano.
“El capitalismo neoliberal no totaliza el Estado necesariamente, sino el mercado. Por eso hoy estamos viendo un movimiento de grandes burocracias privadas que controlan la producción y hasta los medios de comunicación”, manifestó Mora.
El ascenso de fuerzas políticas denominadas de extrema derecha, la creciente manipulación de la conciencia humana y el debilitamiento de las democracias y de los derechos humanos, fueron los otros factores que apuntó Mora, sobre las consecuencias del modelo imperante.
El académico uruguayo Yamundú Acosta, también advirtió sobre el fenómeno del ascenso de la extrema derecha en diversas regiones del mundo, en su exposición acerca de los orígenes y características del totalitarismo de mercado. Aunque destacó que su país Uruguay y Costa Rica, se consideran aún democracias plenas, dicha plenitud tiende a verse amenazada a nivel global por esas aspiraciones que quieren “transformar lo humano en mercancía”.
Sociedad “displicente”
Frente al empoderamiento de estos fenómenos, el vicerrector de Extensión, Martín Parada, llamó la atención ante una sociedad a la que calificó de “displicente”. “Esto lo menciono porque los sectores rezagados de las poblaciones heterogéneas cada vez se subsumen más en la pobreza, en el desempleo, en la falta de oportunidades y en la exclusión social”.
De ahí que reconociera la importancia estratégica de este tipo de encuentros que ayuden a repensar una sociedad distinta y a reflexionar sobre “aquellos pueblos que por a, b o c razones han sucumbido a los paradigmas de la modernidad”, manifestó Parada.
Bajo esa misma visión crítica, el director del Idespo, Norman Solórzano, indicó que se ha comprobado una ineficacia en la visión de que el mercado es el mejor y el único distribuidor de oportunidades para que las personas puedan vivir dignamente.
“En este siglo XXI estamos presenciando movimientos que son calificados como neofascistas, que representan la nueva oleada de avance de las derechas más recalcitrantes. Es en ese contexto donde las democracias se vacían de contenido”, afirmó Solórzano durante el acto de apertura.
Durante los tres días del encuentro se desarrollaron mesas temáticas alrededor del eje central del totalitarismo de mercado, como los desafíos del movimiento social popular en América Latina, la crisis civilizatoria y de derechos humanos. Además, se hizo un homenaje a la figura de la Franz Hinkelammert al cierre del primer día de actividades.