Estudiantes de Relaciones Internacionales viajaron a Cuba para realizar un aprendizaje in situ sobre el modelo económico socialista, motivados por el profesor Antonio Barrios y el director de la Escuela, Max Sáurez.
Sesenta alumnos de la Escuela de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional (UNA) viajaron a Cuba, del 16 al 20 de mayo, como parte de la promoción de un aprendizaje in situ de los asuntos internacionales.
Participaron en esta experiencia estudiantes de los cursos Paz y conflicto, de la carrera de Relaciones Internacionales, y Geografía política, de Comercio Internacional, impartidos por el profesor Antonio Barrios, organizador de la gira académica.
Barrios destacó que la Escuela motiva a los profesores a enviar a los estudiantes a diferentes países, donde puedan aprender en la práctica temas relacionados con los cursos. De hecho, ya otros docentes han organizado giras de aprendizaje con sus alumnos a países como Nicaragua, Panamá y Cuba.
En este nuevo viaje a Cuba, el objetivo fue que los estudiantes entendieran en qué consiste una economía socialista, todo el proceso revolucionario de la Isla, así como el bloqueo económico y comercial por parte de Estados Unidos.
Los estudiantes fueron recibidos por el Instituto Superior de Relaciones Internacionales (ISRI), el cual impartió una serie de cuatro charlas para los jóvenes.
La primera tuvo como tema La Historia de Cuba, la segunda se llamó Política Exterior de Cuba, la tercera trató la temática de las Relaciones Políticas entre Estados Unidos y Cuba, finalizando con la charla sobre Relaciones Comerciales entre Cuba y el resto del mundo.
El fin principal del viaje fue académico, sin embargo, los alumnos tuvieron la oportunidad de conocer La Habana y hacer un poco de turismo. Dentro de las tareas asignadas por el profesor en éste recorrido, estuvo presentarse y hablar con las personas en la calle, para conocer al pueblo cubano y adentrarse en su ideología, con la finalidad de aprender in situ y vivir esa experiencia de entendimiento más allá de los libros y las aulas.
Para apoyar a los estudiantes en esta experiencia académica, la UNA hizo un aporte económico importante, según Barrios, a través de la Federación de Estudiantes de la Universidad Nacional (FEUNA), el Consejo de Asociaciones Estudiantiles y el Departamento de Bienestar Estudiantil de la Vicerrectoría de Vida Estudiantil.
