Movilización en las calles preparan los sindicatos de las universidades públicas, de no llegarse a un acuerdo satisfactorio con el gobierno sobre el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES).
Movilización en las calles para la segunda quincena de agosto y movimientos o “piquetes” en cualquier momento preparan los sindicatos de las universidades públicas, de no llegarse a un acuerdo satisfactorio con el gobierno sobre el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES), aseguró Álvaro Madrigal, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional (SITUN).
La decisión se fundamenta en la “indiferencia” de los ministros integrantes de la Comisión de Enlace ante las propuestas de financiamiento de la educación superior planteadas por los rectores y rectoras de las universidades públicas reunidos en la Comisión Nacional de Rectores (CONARE), la cual no favorece la consecución de un acuerdo.
El planteamiento inicial de los rectores fue un 11% de crecimiento real para el 2011 y subir un punto porcentual cada 12 meses hasta llegar a un 15% en el 2015. El gobierno, por su parte, ha mantenido su oferta de un 4% de crecimiento real en 2011 y 4,5% real en cada uno de los años siguientes más el porcentaje de inflación, además de un crédito externo por $200 millones para inversión en infraestructura y equipo. Luego de reunirse con sus equipos técnicos, los rectores y rectoras presentaron una nueva propuesta a la Comisión de Enlace, ante la cual el gobierno no se había pronunciado al cierre de esta edición.
“Sin un presupuesto justo las universidades estatales comenzarían a contraerse, es decir, tendrían que recibir menos estudiantes, recortar becas, no podrían crear nuevas sedes regionales ni dotarlas de infraestructura y equipo, y tendrían que cerrar programas y proyectos”, advierte la campaña que el SITUN promueve entre los universitarios de la UNA, a través de afiches y desplegables.
En el campo laboral –insiste el SITUN- una inapropiada negociación del FEES podría significar despidos o cese de contrataciones de personal interino, además de la eliminación de derechos conquistados a través de la negociación colectiva.
El secretario general del SITUN, Álvaro Madrigal, fue enfático en que en las universidades públicas no hay salarios de privilegio; más bien destacó que los salarios de algunos profesionales están por debajo de los que ofrecen muchas instituciones públicas y el sector privado.
En este sentido, Madrigal subrayó que el SITUN apuesta por una política de salarios crecientes que dignifique al trabajador universitario y “no estamos dispuestos a sacrificarla por una mala negociación del FEES”.
El sindicalista espera que la presidenta de la República, Laura Chinchilla, intervenga para que se logre un acuerdo justo entre el gobierno y las universidades; sin embargo expresó que “sin medidas de presión no creemos que se logre nada”, por lo que reiteró la decisión de movilizaciones en las calles de parte de los universitarios por un financiamiento adecuado de la educación superior.
