Sonrisas y una que otra lágrima por la satisfacción del deber cumplido fueron algunos de los sentimientos externados por los 42 estudiantes de la División de Educación Rural (DER) del Centro de Investigación y Docencia en Educación (Cide) de la Universidad Nacional (UNA) que el pasado sábado, 25 de mayo recibieron su título que los certifica como licenciados en Educación Rural I y II ciclo de la educación general básica.
La DER es una unidad académica que desde hace más de 35 años trabaja en la línea académica de la docencia, extensión, investigación y producción, en estrecha vinculación con la vida de las personas que habitan en contextos rurales. Desde ahí, ha asumido el reto de presentar una oferta educativa para la formación de docentes en la carrera de Licenciatura en Educación con énfasis en Educación Rural I y II Ciclos, en procura de garantizar la excelencia del futuro educador con disposición y bagaje académico requerido para desenvolverse en los distintos espacios rurales de Costa Rica.
Edder Morales, graduado de la DER proveniente del territorio indígena Bribri, en Talamanca, expresó su agradecimiento a Sibó (principal divinidad de los indígenas de Talamanca, creador de la tierra, los seres humanos, la sabiduría, valores y costumbres indígenas) y a la UNA por la oportunidad de su formación profesional, así como a sus familiares, docentes y compañeros que formaron parte del crecimiento personal y aventuras académicas.
Morales reconoció en la UNA estar siempre al lado de los pueblos, por lo que hace justicia a su lema: “La Universidad Necesaria”. “Gracias a la universidad pública logré estudiar, a pesar de venir de una zona lejana y hoy obtener mi título como licenciado en educación I y II ciclo”, comentó Morales.
Kimberly López, también graduada como licenciada en educación por la DER-Cide, manifestó que ser becada UNA le permitió realizar sus estudios superiores sin ningún contratiempo. “Al saber que la universidad ponía su granito de arena para que yo pudiera estudiar, me motivó a dar mi mayor esfuerzo para alcanzar esta meta”, señaló López.
Erika Vásquez, decana del Cide-UNA, indicó que la oportunidad de acceder a la educación en regiones rurales es fundamental para el desarrollo y progreso de las comunidades, por lo que es meritorio reconocer el trabajo que realiza la DER, la cual cada fin de semana se desplaza cientos de kilómetros para ejecutar la docencia, extensión e investigación y garantizar el acceso a la educación a los pobladores de las las comunidades más lejanas del país.
Martín Parada, vicerrector de Extensión de la UNA, instó a los nuevos licenciados en educación a contribuir con el desarrollo del país, así como atender las necesidades y problemas de los demás, pues en sus manos está la formación de los costarricenses del mañana.
