Hace 50 años con la fundación de la Universidad Nacional, nace en paralelo la Escuela de Relaciones Internacionales, siendo todo un reto de la época ya que no existían las relaciones internacionales como disciplina en nuestro país. Hoy, cinco décadas después, se llevó a cabo la ceremonia de celebración del 50 aniversario de la escuela, en un acto muy especial rodeado de autoridades, académicos, administrativos y estudiantes, así como representación de Gobierno y personas diplomáticas.
En mayo de 1973, los pioneros de la Escuela se dieron a la tarea de seguir ejemplos y conocimientos de las únicas tres escuelas de RI en Latinoamérica, como lo eran en Argentina, Chile y México, y como parte de las acciones de las autoridades estatales se emprendió mejorar la proyección internacional del país y se ordena la conformación de la Escuela de RI-UNA.
El señor Roberto de la Ossa Thompson, primer director de la escuela RI-UNA, destacó la lucha por establecer una base de doctrina en la disciplina, lograr independizar la Escuela de RI de la diplomacia, marcando un hito ideológico y académico, y la creación del instituto de servicio exterior con la creación de la Academia Diplomática Manuel María de Peralta.
Thompson se mostró agradecido y feliz de poder estar presente en la celebración. “La Escuela de Relaciones Internacionales se ha distinguido a lo largo de estas cinco décadas, eso se ve en sus graduados, sus programas, su cuerpo docente y en quiénes la dirigen. Ha sido una Escuela que se ha distinguido en el seno de la Universidad Nacional y a nivel nacional. Creemos que nos esperan muchos años más de trabajo para realizar los sueños que estoy seguro todos compartimos”, indicó el exdirector.
A través de los años, formar profesionales responsables del diseño y ejecución de la política exterior del Estado y graduar especialistas con una visión integral de los distintos escenarios, han sido parte de los objetivos de la escuela RI-UNA, permitiéndole al país contar con profesionales capaces de incursionar en diversas ramas de la producción nacional.
Para el director de la Escuela RI-UNA, Marco Méndez Coto, esta celebración es motivo de orgullo y alegría, resaltando la madurez y la identidad propia alcanzadas por la escuela a lo largo de su historia. Méndez en su discurso y con miras al futuro destacó en cuatro puntos claves las aspiraciones para la escuela del centenario. Primero, buscar la vanguardia pedagógica y la innovación curricular, incluyendo un programa de nivel doctoral y nuevos enfoques de enseñanza. Segundo, abogar por una comunidad cosmopolita, con mayor movilidad académica internacional y personalidades destacadas en las aulas. Tercero, enfatizar la equidad de género y diversidad, y luchar por una participación igualitaria en la educación. Cuarto, apuntar al impacto global de la producción científica de la escuela, buscando investigaciones con relevancia mundial.
Durante la ceremonia se proyectó un video de la escuela, haciendo un repaso de sus ex directores, y a su vez se le brindó un homenaje en reconocimiento por su labor y trayectoria a los presentes: Roberto de la Ossa Thompson, Mayrand Ríos Barboza, Carlos Cascante Segura y Rosmery Hernández Pereira.
Por otra parte, la Viceministra de Asuntos Bilaterales y de Cooperación Internacional, Lydia Peralta Cordero, reconoció la afinidad natural entre la carrera y la labor diplomática, subrayando la estrecha relación entre la escuela y la Academia Diplomática Manuel María de Peralta, la cual fue fundada hace 35 años, y contó con la ayuda de la Escuela para el diseño de programas, cursos y muchas otras capacitaciones que se han venido brindando a través de los años. Así mismo, Peralta resaltó la contribución de la escuela en el análisis, desarrollo, gestión y ejecución de múltiples iniciativas relacionadas con las relaciones internacionales y la política exterior de Costa Rica.
La decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Marta Sánchez López, mencionó el papel valioso de la escuela en la comprensión de los fenómenos internacionales, a través de programas de investigación, extensión y docencia. También, resaltó su compromiso con la equidad y la justicia social, basando sus decisiones en evidencia científica rigurosa.
El acto culminó con las palabras del señor rector de la UNA, Francisco González Alvarado, señalando la visión y el esfuerzo de los fundadores en aquella época, representando pilares fundamentales para la universidad y siendo un proyecto histórico en el progreso del país. González subrayó la importancia de la Escuela en la formación de diplomáticos y en el desarrollo de la política exterior, comercio y cooperación de Costa Rica en los foros internacionales. Además, destacó el compromiso de la Escuela con la paz, la justicia y los derechos humanos, así como su participación en el debate de política exterior.
Hoy, en el marco de su 50 aniversario, la Escuela de Relaciones Internacionales continúa trabajando en aras de alcanzar la excelencia académica, siendo capaz de comprender y explicar la realidad internacional; siendo un agente de cambio y transformación, ofreciendo programas de grado, maestrías y proyectos de investigación en política internacional y comercio.
