El pasado 30 de octubre, se informó de un ataque de cocodrilo a un menor de edad en la localidad de Cuatro Millas, en el cantón de Matina. Por recomendación de los especialistas, y con el objetivo de salvaguardar la vida de la personas, el pasado 2 de noviembre el Sistema Nacional de Áreas de Conservación y el Área de Conservación La Amistad Caribe, giraron instrucciones para que funcionarios de esta última dependencia, en conjunto con Iván Sandoval, biólogo de la UNA y Juan Bolaños, consultor externo, se trasladaran a la zona para capturar al cocodrilo que causó el fatal accidente.

 “El primer día colocamos trampas y muestreamos alrededor de 7 kilómetros de río pero no pudimos observar huellas o marcas. Para el viernes realizamos un nuevo recorrido por la mañana, y al regreso los vecinos nos indicaron que el cocodrilo había sido visto asoleándose en el sitio del accidente”, detalló Sandoval.

De acuerdo con el especialista, el animal tiene un comportamiento muy esquivo, y aunque se colocaron trampas y se solicitó a los vecinos alejarse del lugar para que el cocodrilo se sintiera seguro y saliera, todos se mantuvieron en el sitio.

Por la tarde tuvimos otro inconveniente, y fue que una cabeza de agua bajó por el río y se llevó algunas de las trampas, otras sufrieron vandalismo y otras quedaron inactivas”.

Los especialistas salieron de la zona el pasado 6 de noviembre, pero esperan regresar en unos días, cuando la situación alrededor del río se haya normalizado para que el cocodrilo retome sus hábitos cotidianos y pueda ser capturado.

Según Sandoval, este es un animal bastante grande, que por su comportamiento y tamaño puede continuar siendo un problema para la comunidad, y por ende se tratará de capturar en un futuro cercano. El especialista insta a la comunidad de Matina a no tratar de atrapar a este cocodrilo, ya que por sus características, es bastante esquivo y podría ocasionar otra tragedia.