Sismógrafos del OVSICORI registraron deslizamientos significativos ocurridos en el volcán Irazú durante 2014 e inicios de 2015.
Varios deslizamientos en la parte superior del flanco norte del volcán Irazú han ocurrido durante el 2014 e inicios del 2015, los más significativos han sido registrados por la red de sismógrafos del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de la Universidad Nacional (OVSICORI-UNA), ubicada en el macizo volcánico.
Esta zona se caracteriza por tener altas pendientes e inestabilidad, por lo que son terrenos propensos a sufrir fuerte erosión y frecuentes deslizamientos, principalmente durante épocas de lluvia intensa. Como resultado, se han formado grietas en la zona cercana a las antenas y equipos de transmisión de algunas televisoras, radioemisoras y servicios de emergencia.
Asimismo, los sismos de baja frecuencia que se venían registrando instrumentalmente desde fines del 2011 en el volcán Irazú se dejaron de registrar súbitamente a partir del 17 de diciembre del 2014, cuando un tremor de gran amplitud (el cual logró registrarse hasta en las estaciones sísmicas ubicadas en el volcán Poás) “destruyó” el sistema o régimen que producía esta sismicidad de baja frecuencia. Este tremor tuvo una duración aproximada de 100 segundos y su energía sísmica liberada es similar a la energía sísmica del tremor que se registró en el volcán Turrialba horas antes de la explosión estromboliana del 29 de octubre 2014.
Sin embargo, este evento no tuvo consecuencias ni manifestaciones en la parte externa del volcán, ni siquiera fue sentido en la cima. Por tanto, sus efectos deben buscarse en el interior del sistema magmático hidrotermal.
