La luz era tenue, ya la lluvia se había disipado y el ambiente era propicio para el canto y la poesía.
España se conjuntó con Uruguay y recalaron en Costa Rica. Más específicamente, en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales y atendieron de manera generosa al llamado del grupo de Poesía y Canto de la Facultad de Ciencias Sociales, que vio la luz en plena pandemia y que ha recorrido diversas comunidades.
Fue la iniciativa de la psicóloga Martha Sánchez, del sociólogo y escritor Guillermo Acuña, de la planificadora y actriz Enid Sofía Murillo y de la socióloga y bailarina Natalia Herra, quienes se propusieron consolidar esta iniciativa hasta que lo lograron. Todo un ensamble de voluntades que dieron origen a esta iniciativa que, como en la noche del martes 24 de octubre, dieron rienda suelta al talento.
Los encargados fueron el dúo español Poesía Necesaria, conformado por los músicos compositores e intérpretes Manuel Madrid y Néstor Paz, quienes llevan más de 25 años de trabajo juntos. Su recorrido artístico va acompañado de las obras insignia de Antonio Machado, Miguel de Unamuno, Gustavo Adolfo Bécquer y de Pablo González de Langarika, entre otros connotados autores. Ellos musicalizan la palabra, le dan la textura, el color y el sentimiento.
El escenario lo compartieron con el cantautor y musicoterapeuta Javier Alonso, de nacionalidad uruguaya, quienes deleitaron con un repertorio que abarcó hora y media de música y poesía.
El dúo Poesía Necesaria y Javier Alonso alternaron con la poesía de Guillermo Acuña, decano a.i. de la Facultad de Ciencias Sociales y sus sentidas manifestaciones vinculadas con los procesos migratorios que hoy más que nunca, están latentes en nuestra región, así como de la realidad de las sociedades combativas.
“Conversado con ellas”
Guitarras en mano y con el sentimiento hecho música, los artistas invitados hicieron un homenaje a todas las mujeres, con escritos elaborados por 15 poetisas, quienes han dejado huella en el terreno de la cultura y que reflejan la realidad social que muchas de ellas deben vivir.
No en vano, los cantantes hicieron mención de que este próximo 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. De ahí que la velada llevara por nombre “Amor se escribe sin sangre”, con un mensaje claro para acabar con todo tipo de violencia que sufren las mujeres.
Por ello, el repertorio abarcó desde la situación laboral de las mujeres de zonas rurales, hasta los recuerdos de las vivencias en una casa antigua. Fueron historias que trataron de los amores separados por la fuerza del destino, hasta el sabor de la patria añorada, así como de las migraciones forzadas.
“Muchacha no sufras de despedidas. Tu amor ya navega en aguas de huida” se escuchaba entonar en una alegoría sobre el amor propio. Y así, la noche transcurrió en un ambiente de calidez y conciencia. Mientras la lluvia amainaba, adentro, la música y la poesía supieron llenar todos los espacios posibles. Y el público presente lo agradeció.
