Este miércoles 8 de marzo iniciará un proceso para sustituir árboles de especies exóticas por especies nativas, con el objetivo de promover la conservación de la biodiversidad de aves y otras especies.
Ubicada en San Isidro de Heredia, la finca Breña Mora fue adquirida por la Universidad Nacional en 1990. Hace dos décadas, cerca de tres hectáreas se reforestaron con especies exóticas de eucalipto, ciprés y pino. De acuerdo con estudios del Instituto de Investigación y Servicios Forestales de la Universidad Nacional (INISEFOR-UNA), en la actualidad, los individuos de estas especies tienen grandes dimensiones y se encuentran en una fase madura de su desarrollo. Esta plantación forestal presenta una densidad alta de árboles que dificulta la colonización de especies nativas y la restauración natural pasiva, lo que a su vez no favorece la visitación de aves y otra fauna propia de la zona.
“Estas especies exóticas tienen la particularidad de que sus frutos son secos, y sus semillas son dispersadas por el viento, con lo que no aportan sustancialmente a la fauna como sí lo harían otras especies nativas”, citan los investigadores.
El proceso de rearborización que iniciará la UNA, consiste en aprovechar o eliminar los árboles adultos de especies exóticas, y reforestar o colocar en la misma área, especies de árboles nativos de la zona, como lo son: cacho de venado, cedrillo macho, lloró, pilón de altura, lorito de altura y moquillo. Además de individuos de otras especies como robles, encinos, damas, cedro dulce, arrayán, cucaracho, palo de papa, azulillo y aguacatillos, entre otros.
En total, de acuerdo con los investigadores, se pretende sembrar entre 20 y 30 especies seleccionadas según el clima, el suelo y las condiciones de la finca. “Ha este proceso le hemos llamado rearborización de la finca Breña Mora, pues se pretende la regeneración natural, la reforestación y la protección de los espacios naturales.
Paso a paso
Este proceso de rearborización consta de 4 fases:
- Aprovechamiento forestal de especies exóticas.
- Viverización, reubicación y/o compra de especies nativas.
- Siembra de especies nativas en áreas previamente aprovechadas.
- Mantenimiento de áreas reforestadas.
Durante todo este proceso, planificado para 4 años, se velará por el cuido y resguardo de las zonas de protección de la quebrada.
Durante el primer año se realizará un aprovechamiento forestal para abrir espacios a futuras intervenciones, así como la extracción de madera para su procesamiento. Además, se delimitarán las áreas a ser plantadas y se iniciará la planificación del proceso de rearborización con especies nativas, sembrando en áreas que no serán impactadas en próximas etapas del aprovechamiento forestal.
Para el segundo año se realiza el aprovechamiento forestal en la parte central de las plantaciones de eucalipto, ciprés y pino, se continúa con el programa de siembra y se le da seguimiento a lo plantado anteriormente.
Para el tercer año se termina con el aprovechamiento forestal, se extrae toda la madera y se planifica el proceso de restauración en todas las áreas que puedan ser plantadas con especies nativas, además de incentivar el proceso de regeneración natural de la finca. También se programa el mantenimiento de todas las áreas sembradas al menos los primeros 3 años para asegurar el crecimiento, y desarrollo de las especies forestales, arbustivas y frutales establecidas.
En el cuarto y último año, se le dará mantenimiento a todas las áreas sembradas para asegurar el crecimiento y desarrollo de las especies sembradas.
Una vez concluido el proyecto, además de promover áreas para la conservación de la biodiversidad, se pretende la apertura de espacios para promover actividades de recreación, senderismo, y aumentar la belleza escénica.
La finca Breña Mora representa un espacio idóneo para ser aprovechado institucionalmente para idear y co-crear propuestas innovadoras entre la academia y otros actores del sistema nacional de ciencias, tecnología y emprendimiento, que se materialicen en proyectos con alto potencial innovador y de transferencia que impacten a la sociedad costarricense.
La meta es lograr que sea un punto de encuentro y articulación de la acción sustantiva mediante la inter, multi y transdisciplinariedad del diálogo de saberes entre los actores de la academia, el estados y sector privado (empresas, ONG, otros), para potenciar toda aquella iniciativa surgida dentro de la institución, desarrollada por académicos o estudiantes, propuestas de instancias gubernamentales y del sector privado que deriven en productos o servicios innovadores.