Conforme han pasado los años, existe una mayor apertura de parte de la ciudadanía para reconocer el pluralismo y la diversidad religiosa presente en la sociedad, de acuerdo con una de las conclusiones del proyecto de investigación Significados de laicidad en la opinión pública, a cargo de la Escuela Ecuménica de Ciencias de la Religión de la Universidad Nacional (UNA). Asimismo, una mayoría de personas está favor del Estado laico, desde una perspectiva de reforma jurídica y política.
Para obtener estas conclusiones, el equipo de investigación, a cargo de los académicos Laura Fuentes, Kattia Castro y Juan Manuel Fajardo, plantearon una metodología de trabajo a partir de un análisis político-legal, mediático y desde la opinión pública, abarcando el periodo del 2001 al 2021.
“Este proyecto nace ante el interés de analizar un tema tan importante como es la laicidad en el contexto de los cambios que se han dado en nuestra sociedad en las últimas décadas. Entonces, ahí nos interesó preguntarnos, ¿cómo se está viviendo o pensando el tema de lo religioso a nivel de Estado?”, justificó Fajardo, uno de los investigadores.
En la primera fase del proyecto, se realizó un análisis de los cuatro proyectos de ley presentados a la corriente legislativa en el 2003, 2009, 2012 y 2019 y cuyo eje central ha sido plantear una reforma al artículo 75 de la Constitución Política para pasar de un Estado confesional a un Estado laico.
Con sus matices, los proyectos proponían introducir a la Carta Magna conceptos relacionados con la “libertad de tener una religión y profesarla”, “la neutralidad del Estado en temas religiosos”, la “garantía de la libertad de conciencia” y el “respeto al pluralismo religiosos”. Ninguno de estas iniciativas se ha aprobado.
Mientras la discusión se ha generado en el Congreso, diversas encuestas también han tratado de reflejar la opinión de los costarricenses sobre este tema, durante el periodo de análisis. Por ejemplo, en el 2011, la empresa Unimer retrató que un 41% de las personas estaban a favor la eliminación de la religión oficial, mientras que, diez años después (2021) un trabajo del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad de Costa Rica ubicó este apoyo en un 60,1%.
La última encuesta que sobre este tema realizara el Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) data del 2018 y estableció que un 53% de la población estaba de acuerdo con el Estado laico y la eliminación de la religión oficial, versus un 42% que apoyaba la confesionalidad.
La segunda fase del proyecto consistió en analizar los enfoques periodísticos en el abordaje de este tema del 2001 al 2021. En total, se analizaron 242 publicaciones correspondientes a 12 medios de comunicación de alcance nacional.
La investigación determinó que, a lo largo de los años, ha evolucionado el uso de expresiones vinculadas a la temática. Por ejemplo, en un primer periodo del 2001 al 2006, los términos que más se empleaban era “religión” o “libertad de culto”; sin embargo, para el periodo 2007-2012 ya empezaba a circular en la prensa acepciones como “derechos humanos” o “Estado laico”, que se mantienen en la actualidad.
Para el periodo 2017-2021 la evolución en el uso de términos permitió identificar conceptos como “libertad de religión, “Estado ateo”, “convicciones personales” y “creencias”, como las predominantes.
El estudio concluye que tanto los proyectos legislativos como la cobertura mediática, han contribuido a abrir un debate público sobre el tema. “A partir del análisis de cuatro proyectos de ley, cuyo objetivo primordial ha sido laicizar el Estado costarricense y su posterior proceso de comunicación en la prensa, es posible distinguir el inicio de una ‘política de formulación discursiva’”, cita el informe.
¿Qué dicen las personas?
La tercera fase abarcó 20 entrevistas a líderes de opinión de las siete provincias. En un primer grupo se entrevistó a 10 personas con edades entre 18 y 30 años, mientras que el segundo, con igual cantidad de entrevistados, tenían entre 65 y 85 años.
Entre ambos grupos, el grupo etario más joven, manifestó una mayor apertura hacia la laicidad. “La investigación ha permitido marcar diferencias generacionales, reconociendo que la población joven ha nacido y crecido con este debate, versus las personas adultas mayores, que mantienen otra mentalidad, costumbres y responden a otro contexto cultural”, señaló Fajardo.
Por ejemplo, en el núcleo de igualdad entre religiones y neutralidad estatal, existe respaldo entre los entrevistados hacia la eliminación del Estado confesional, así como el presupuesto asignado a la religión oficial. Se defiende además el estado laico y se cuestiona la moral universal y las buenas costumbres.
En el núcleo de derechos humanos, las personas cuestionan el hecho de que el Estado esté ejerciendo una neutralidad en el respeto hacia derechos sexuales y reproductivos de mujeres y de grupos como el que representa a la población LGBTIQ+.
“Lo que vemos a partir de esta investigación es que existe un cambio. La gente no está pensando tanto en los conceptos jurídicos que plantearon los diputados al proponer los proyectos de ley, sino más que todo en un laicidad práctica y vivencial, podríamos llamarlo una ‘laicidad cultural’, que debería sr tomada en cuenta por los legisladores al momento de plantear nuevas propuestas y socializarlas”, concluyó Fajardo.