Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility

¿Cuánto hemos avanzado en producción y consumo sostenible?

Las académicas, MSc. Kerlyn Suárez Espinoza y MSc. Fiorella Salas Pinel, del programa Sectores Productivos y Desarrollo, de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional, nos comparten su análisis de opinión sobre el Objetivo de Desarrollo Sostenible 12, abriendo la interrogante de ¿Cuánto hemos avanzado en producción y consumo sostenible?

De acuerdo con las Naciones Unidas, se estima que, a nivel mundial, un tercio de toda la comida producida (el equivalente a 1300 millones de toneladas con un valor cercano al billón de dólares) acaba pudriéndose en los cubos de basura de los consumidores y minoristas, o estropeándose debido a un transporte y unas prácticas de recolección deficientes, cada año.

Esto pone en evidencia que el consumo no es el único fin y propósito de toda producción, como lo indicaba Adam Smith, desde sus inicios de las bases teóricas de la economía. La perspectiva de que la economía ocurre bajo procesos lineales y la consideración de que existe una desvinculación entre el crecimiento económico de la degradación ambiental se superan cuando se toman en cuenta el carácter finito de los recursos naturales y las externalidades negativas generadas por los procesos de producción y consumo. Por ejemplo, es conocido que, la degradación de la tierra, la disminución de la fertilidad del suelo, el uso insostenible del agua, la sobrepesca y la degradación del medio marino están disminuyendo la capacidad de la base de recursos naturales para suministrar alimentos.

Estas condiciones de la producción y el consumo lineal fueron consideradas al establecer en el 2015 los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en particular, el Objetivo 12: “Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles”; en el que se busca la adopción de modalidades de consumo y producción sostenibles, gestión sostenible y el uso eficiente de los recursos naturales, reducir el desperdicio de alimentos, gestión racional de productos químicos y desechos, reducir generación de desechos, adquisición pública sostenible, estilos de vida en armonía con la naturaleza, turismo sostenible y racionalizar los subsidios a los combustibles fósiles. Para el año 2016, Costa Rica se convirtió en el primer país del mundo en firmar un Pacto Nacional por los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que en el marco de la Agenda 2030 busca que nadie se quede atrás.

Dentro de las estadísticas más relevantes del Sistema Nacional de Indicadores para los ODS en Costa Rica, se tiene que el consumo material interno en el año 2019 fue de 48,364 toneladas, lo que representa un 9.56 de toneladas por persona, lo cual muestra una leve mejora respecto al año 2018. Sin embargo, según datos oficiales del Ministerio de Salud, ente rector en temas de residuos, la proporción sobre los residuos sólidos urbanos generados y con descarga final adecuada es del 6.24%, en el 2020, siendo un porcentaje muy bajo respecto a la generación total. De igual manera, para el año 2020 se registra una tasa de reciclaje del 3.12%, de compostaje 3% y un coprocesamiento de 0.12%.

Además, según la Alianza Empresarial para el Desarrollo, en Costa Rica, 43 empresas publican reportes o memorias de sostenibilidad y, de esas 43 empresas, un 37%, equivalente a 16 empresas, cumple con los requerimientos esperados por el indicador 12.6.1. del ODS 12.  Con requerimientos mínimos se cuentan 10 empresas, y 6 con requerimientos avanzados.

A pesar de los avances que se cuentan en Costa Rica, se requiere un mayor compromiso para alcanzar las metas de los indicadores al 2030; así como la respectiva disponibilidad de indicadores ambientales, que permitan evaluar el desempeño de este y otros ODS, considerando que se dispone de únicamente siete años para alcanzar dichas metas.

Es de rescatar que en el Plan Nacional de Desarrollo 2023-2026 se evidencian más acciones orientadas a la producción que al consumo sostenible. Respecto a este último, se proponen iniciativas para mejorar la intensidad energética. En cuanto a la producción sostenible, se hace mención sobre agricultura eficiente y rentable baja en emisiones, pesca y acuicultura sostenible, fomento agropecuario para la producción sostenible y Buenas Prácticas Agrícolas. Además, Costa Rica cuenta con una Política de Producción y Consumo Sostenible, en la que se abordan temáticas desde una visión sostenible como el turismo, la construcción, estilos de vida, sistemas agroalimentarios, producción sostenible, compras públicas sustentables y fortalecimiento institucional; que debe ser ejecutada.

Aunado a este instrumento, el Segundo Informe Nacional Voluntario indica que también se dispone de la Política Nacional para la Gestión Integral de Residuos (PNGIR) 2010-2021 y la Estrategia Nacional de Reciclaje 2016-2021, la Estrategia Nacional para la reducción de plásticos de un solo uso, ya que este ODS contempla elementos más allá del reciclado, que implican cambios en los hábitos de producción y consumo alineados a prácticas de economía circular.

La disponibilidad de estos instrumentos marca una hoja de ruta importante a nivel de políticas públicas estatales, sin embargo, cada organización o persona debe contribuir desde su ámbito de acción, propiciando la incorporación de más actividades económicas y humanas en la lógica de la sostenibilidad, sustentado por la concientización y educación ciudadana; esto para acercarnos a las metas propuestas en éste y otros objetivos del desarrollo sostenible.

Breves

Febrero 28, 2024

Campamento exitoso

Febrero 15, 2024

¡Son bienvenidos!

Diciembre 06, 2023

LA UNA por los océanos

Diciembre 05, 2023

Noches de ópera

Septiembre 29, 2023

¡Conversemos sobre salud!

Agosto 07, 2023

III Edición EDA Expo

Mayo 03, 2023

¡Vamos a la UNA!

Marzo 22, 2023

Justicia curricular